Bitcoin cotiza actualmente más de un 9% por debajo de su máximo histórico de $124,500, lo que refleja el peso de la reciente presión vendedora. A pesar del retroceso, los bajistas han tenido dificultades para empujar el precio por debajo de la zona de soporte de $105,000, un nivel que hasta ahora ha actuado como un suelo firme para el mercado. El debate entre los analistas se intensifica: algunos piden una corrección más profunda que podría restablecer el sentimiento sobrecalentado, mientras que otros ven la acción actual del precio como un preludio de otra prueba de los máximos históricos.
El principal analista Maartunn compartió nuevas perspectivas, describiendo el entorno actual como una "reorganización importante de Bitcoin". Según él, las monedas antiguas fluyen cada vez más hacia las carteras de ETF, un fenómeno marcado por tres olas significativas: verano de 2024, otoño de 2024 y verano de 2025. A diferencia de ciclos anteriores, donde tales eventos de redistribución generalmente ocurrían una vez antes de desvanecerse, este ciclo ha mostrado un patrón repetido de rotación de la oferta.
Esta tendencia inusual destaca un cambio estructural en la dinámica del mercado de Bitcoin. Los tenedores a largo plazo parecen estar reduciendo la exposición, mientras que los ETF y los vehículos institucionales continúan absorbiendo la oferta. Si esta redistribución estabiliza el mercado o alimenta una mayor volatilidad será un factor definitorio para la trayectoria de Bitcoin en los próximos meses.
Se desbloquea la oferta antigua de Bitcoin: Dinámica del mercado en foco
Según Maartunn, recientemente se ha producido un movimiento significativo de 7,626 BTC con una antigüedad de entre tres y cinco años. Este tipo de actividad es notable porque indica que los tenedores a largo plazo deciden liberar monedas inactivas de nuevo a la circulación. Históricamente, tales eventos a menudo coinciden con una mayor incertidumbre del mercado y cambios en el comportamiento de los inversores, lo que refuerza la narrativa de que la antigua oferta continúa jugando un papel decisivo en la configuración de la trayectoria de Bitcoin.
A pesar de esta presión vendedora, Bitcoin ha logrado mantenerse por encima del nivel de $110,000, mostrando resiliencia frente a la toma de ganancias de los tenedores a largo plazo. Esta estabilidad es alentadora, ya que demuestra que los compradores están interviniendo para absorber la oferta, aunque la fuerza de esa demanda sigue siendo cuestionable. Algunos participantes del mercado señalan las entradas de ETF como la razón principal por la que Bitcoin ha evitado una corrección más pronunciada. Los ETF, por su naturaleza, actúan como un sumidero de demanda constante, canalizando capital institucional hacia Bitcoin a través de marcos regulados.
Sin embargo, el riesgo persiste de que, sin una nueva demanda robusta, la presión vendedora de las monedas recién desbloqueadas pueda comenzar a superar el interés comprador. Si esto sucede, los tenedores recientes pueden enfrentar la peor parte de la volatilidad. Por ahora, el mercado parece estar equilibrándose entre la toma de ganancias de los tenedores a largo plazo y la acumulación institucional.
Esta dinámica emergente destaca cómo el ciclo actual de Bitcoin difiere de los anteriores: la participación de los ETF y la redistribución repetida de monedas antiguas están remodelando la estructura del mercado. Las próximas semanas serán críticas para determinar si las entradas de ETF son lo suficientemente fuertes como para compensar el aumento de la actividad de la oferta más antigua y mantener a Bitcoin en una trayectoria alcista.
Bitcoin cotiza actualmente a $112,409, mostrando una modesta recuperación después de la reciente volatilidad. El gráfico destaca un rebote desde la zona de demanda de $109K–$110K, que ha actuado como soporte a corto plazo durante la semana pasada. Sin embargo, BTC ahora enfrenta resistencia al probar el promedio móvil de 50 días (línea azul en $111,661) y el promedio móvil de 100 días (línea verde en $114,382). Estos niveles representan barreras clave para los alcistas que intentan recuperar terreno.
La imagen más amplia muestra que BTC aún se queda atrás de su máximo histórico cerca de $124,500, marcado por la línea de resistencia amarilla. A pesar de múltiples intentos, Bitcoin ha luchado por generar suficiente impulso para volver a probar este nivel, en gran parte debido a la persistente presión vendedora y la cautela entre los operadores. El promedio móvil de 200 días de color rojo en $114,746 se encuentra justo por encima de la acción actual del precio, creando un cúmulo de niveles de resistencia que podrían limitar el alza en el corto plazo.
Si Bitcoin logra cerrar por encima de $114K, confirmaría la continuación alcista y potencialmente prepararía el escenario para una nueva prueba de la zona de $120K–$124K. Por el contrario, no lograr mantenerse por encima de $110K podría hacer que BTC revisite los soportes más bajos alrededor de $106K–$108K. Por ahora, la consolidación domina, con los alcistas que necesitan nueva demanda para superar la resistencia.
Imagen destacada de Dall-E, gráfico de TradingView